La formación adicional que los profesionales de enfermería necesitarían para ser acreditados como prescriptores, debería proporcionarla el propio servicio de salud, tal y como se está haciendo en Andalucía y para el manejo y participación de la enfermera en el seguimiento protocolizado de ciertos tratamientos farmacológicos a través de protocolos y/o guías de práctica clínica y una vez que estas estuvieran confeccionadas y seleccionados los procesos en los que la enfermera pueda participar en esta línea, y como materia formativa ad hoc para adquirir dicha competencia. En caso de que dicha formación requiera ser acreditada, debería ser la Comisión de Formación Continua del SNS quien otorgue dichos créditos, o las mismas (a través de las) CCAA como se desprende de sentencia reciente del TC y con relación a la titularidad en esta materia que dicha sentencia les otorga; en todo caso serán éstas quienes, puntualmente, puedan delegar el proceso formativo en otras institucione...
El uso que de la red estos 19 años últimos hemos hecho, ha provocado el que se dispersen nuestras aportaciones por multitud de espacios virtuales. Llegó el momento de intentar agruparlas en torno a "un mismo espejo". El comportamiento se contagia y la conexión entre nuestras neuronas tambien debe ser entendido como tecnología punta. Espero que os resulte interesante. Somos la literatura gris de la Blogosfera sanitaria.